Verdaderamente lo que me está pasando en esta semana que llevamos de crisis económica y sanitaria es muy interesante.
Al principio pensaba en el futuro, tenía miedo. Muchos gastos que sostener, todo invertido en viviendas, esas viviendas que me dan un alquiler, quizás los inquilinos no me paguen, mi divorcio y pagos a realizar … UF! Todo pintaba muy mal. Estaba nervioso. No voy a tener ingresos. ¿En cuánto tiempo me voy a gastar todos mis ahorros? Gastos de empresa, gastos personales… Se me hacía una montaña muy gorda, pero mucho!
He estado hablando con gente en estos días y veo que mi situación es privilegiada. Aunque no tengo un € donde caerme muerto, en estos días me está gustando esta situación. Me explico.
Mis hijos están conmigo. Los tengo porque quieren quedarse conmigo, la casa es más grande, los niños disfrutan con las comidas que les hago, yo me lo paso genial cocinando, tengo tanto tiempo libre que al final no doy abasto con todas las tareas que hago!!
Esa preocupación y ansiedad que tenía al principio se ha transformado en un toque de atención muy interesante, maravilloso. Estoy muy feliz, mi mente me está diciendo que esto te sirve para despertar, para hace cosas que antes no hacía.
Hay que SER PRÁCTICO y feliz
Estoy estudiando inglés una hora al día, me estoy planteando dejar la inmobiliaria y estoy pensando en trabajar en lo que realmente me pueda llenar. Ayudar a las personas mediante el Coaching. Mi reflexión ha sido que en el trabajo en el que estoy si hay una crisis de este tipo no facturo un euro!! Tengo que trabajar de algo donde la gente me necesite y pueda contactar con ella esté dónde esté. De esta manera si alguna vez me pasa algo similar no tendré ningún problema. Si se acaba internet lo hago presencial, en caso contrario mediante videoconferencia.
Ahora mismo estoy tranquilo. Estos batacazos que te da la vida te los da por algo y ese algo me va ayudar a mejorar, tanto de dentro como de fuera. Yo simplemente le pregunto a mi mente… Dime como salir de esta situación, y mi mente siempre me da la solución. Estoy encantado con lo que está pasando ahora en mi vida, hace unos días no sabia que hacer, no tenía ganas de ir a trabajar…
Ahora hago lo que me apetece: Estoy con mis hijos viendo como ellos no le dan la importancia a esto como se lo daba yo la semana pasada, estudio inglés, cocino, miro la tv o sencillamente no hago nada.
¡¡¡LA VIDA ES MARAVILLOSA!!!
Son las 22:55 de la noche… Esta carta la he escrito a mí mismo, es lo que siento, nada más. Mi familia está bien, yo estoy bien, y esto va a hacer que mejore mucho…
GRACIAS.
Por David Cadorniga, alumno de Coaching Sostenible.